Un análisis interno realizado por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) no encontró evidencia de que Hamas haya robado sistemáticamente la ayuda humanitaria financiada por Estados Unidos en Gaza, contradiciendo las acusaciones de larga data por parte de Israel y algunos funcionarios estadounidenses. La revisión, que examinó numerosos incidentes de ayuda perdida o robada, concluyó que no había pruebas de desvíos a gran escala por parte de Hamas. A pesar de estos hallazgos, algunas fuentes israelíes y estadounidenses continúan afirmando que la ayuda está siendo saqueada o malversada, mientras que otros señalan desafíos logísticos y de distribución como el principal obstáculo. El informe ha generado debate sobre las verdaderas causas de la crisis humanitaria en curso en Gaza y las narrativas utilizadas para justificar las restricciones a la ayuda. Los hallazgos desafían las principales justificaciones para limitar o militarizar la entrega de ayuda a Gaza.
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